Los tapones de rosca son el tipo de tapón más común para los frascos de reactivo GL45. Presentan un diseño roscado que permite un cierre seguro girando la tapa sobre el cuello de la botella. Los tapones de rosca proporcionan un cierre hermético, evitando fugas, evaporación y contaminación del reactivo. Suelen estar fabricados de materiales como polipropileno o polietileno de alta densidad (HDPE), que ofrecen una buena resistencia química. Los tapones de rosca se pueden quitar y reemplazar fácilmente, lo que los hace convenientes para el acceso frecuente al reactivo.